Seguramente por allá os habrán llegado voces de la que se ha liado en Tallin, capital de Estonia, por el desmantelamiento y traslado del monumento de la época soviética al Soldado Libertador y el traslado de los restos de varios soldados rusos fallecidos en combate durante la segunda guerra mundial que allí yacían. También sabreis que el gobierno ruso no se ha tomado esto nada bien y algunos sectores exigen que se tomen represalias a nivel diplomático o económico.
He empezado a escribir una especie de artículo de opinión de tertuliano de la tele pero me he saturado un poco ante el cariz que estaba tomando la cosa, así que creo que es mejor dar simplemente algunos datos que os ayuden a dar un poquito de luz sobre un asunto nada sencillo.
- Para el publo ruso el tema de la Segunda Guerra Mundial (o la Gran Guerra Patriótica como también se le llama) es harto sensible por la desorbitada sangría humana que les supuso (algunos calculos los estiman en 27 millones de muertos) la lucha contra los nazis. Siendo así, consideran que se deben respetar los monumentos en homenaje a los soldados caidos en los lugares donde dieron sus vidas.
- Por otro lado tenemos a un pueblo como el Estonio, ni germánico ni eslavo y más próximo culturalmente a los finlandeses. A grandes trazos los estonios siempre fueron un pueblo dominado por países vecinos (Suecia, Polonia...) y desde fines del s. XVIII pasó a ser parte de Rusia. Como muchos otros pueblos europeos, en el s.XIX comenzó a forjar su identidad nacional no siendo hasta después de la Primera Guerra Mundial que lograron su independencia de la que ya era entonces la URSS (1920). Está independencia duró sólo 20 años, hasta 1940, fecha en la que el país fué de nuevo incorporado a la URSS. Entre el 41 y el 44 el territorio fué ocupado por los nazis y parece ser que hubo estonios en los dos frentes. Después de la guerra se produjeron importantes desplazamientos tanto de población estonia fuera del país como de población rusa a éste. Es por esto que ahora en Estonia cerca de un tercio de la población es de origen ruso (o repúblicas de la antigua URSS).
- Estonia volvió a conseguir su independencia en 1991 y desde entonces las relaciones con Rusia han sido bastante tensas.
- Por otro lado las relaciones entre la mayoria estonia y la minoria rusa dentro del país tampoco parecen ser nada saludables debido a la que parece ser una fuerte política nacionalista del ejecutivo.
- Así tendríamos por un lado a un sector de la población que apoya el traslado del monumento debido a que lo consideran un símbolo de la ocupación soviética y por otro lado a otro sector que dice que ese traslado supone un agravio a la memoria de los soldados rusos que dieron su vida por liberar Estonia de los nazis.
- ¿QUI PRODES?. ¿Quién sale ganado con todo esto?. ¿Están manipulando los gobiernos a la población usando los principios de agitar el arbol para que caigan nueces y mantener tensionado al personal para tener su apoyo?
- ¿O quizás alguien quiere construir unas jugosas torres de oficinas en el solary lo que hay es pasta de por medio?.
- ¿Ha sido quizás un mal movimiento del gobierno estonio?. No solo se enfrenta a un país vecino sino a un tercio de su población. El alcalde Tallin se oponía al traslado del monumento y ahora pide compesaciones económicas al gobierno por los daños causados en los desórdenes públicos.
- ¿Es una injerencia de Rusia en la política interna estonia?. ¿Están exagerando la nota?. Se dice que dentro de la misma Rusia se están demoliendo monumentos similares para darle al ladrillo.
- ¿Quieren los estonios en su política nacionalista borrar el pasado?. Según un testimonio que he localizado en un blog de un profesor que visitó Estonia se dice: "Respecto a la era sovietica, he descubierto que en general parece que no le tienen demasiado aprecio...es mas bien como si quisieran borrar esa parte de su historia. Me recuerda bastante a Espania y la epoca franquista. En algunas guias turisticas, hablan de la historia y se saltan completamente esa parte. En otras, lo unico que dicen de esa parte fue que hubo mucha represion."
Personalmente (y sólo es eso, una opinión) creo que:
- El pasado se debe asumir, comprender y estudiar. Lo contrario, negar el pasado, la amnesia, nos puede llevar a la esquizofrenia. No comparto tampoco iniciativas tomadas recientemente en mi país (España) en el mismo sentido. Como licenciado en historia repudio el uso político de ésta y todo lo que huela a manipular la memoria colectiva a beneficio del poder (aunque sea herramienta de uso común para todos los gobiernos). Personalmente hay actitudes que me recuerdan al típico amigo/a pesado/a que hace dos años que le ha dejado la pareja y un sigue machacándote el oído con el tema.
- Entiendo que como mucho el gobierno ruso debe pronunciarse diplomáticamente pero no adoptar ninguna represalia. A su vez entiendo que dicho gobierno se preocupe por el estado de la minoría rusa en el país y que exiga el respeto de sus derechos civiles.
- Viendo la foto del monumento el lector juzgará su carácter. Yo creo que no supone ningún tipo de exaltación soviética. Yo sólo veo a un soldado taciturno y cabizbajo que se descubre ante las tumbas de sus compañeros. A partir de aquí las interpretaciones que se le quiera dar son a gusto del consumidor.
Y no despedirme sin antes decir que servidor estuvo en Tallin el año pasado y le pareció un sitio encantador y digno de visitar (y eso que era febrero) además los precios eran bastante razonables. Así que no puedo sino recomendar su visita independientemente de los avatares políticos (en lo posible claro está, si uno es ruso no es buen momento para ir...).
Para más información aquí hay una historia de Estonia bastante exhaustiva y en este otro lado un encarnizado debate (en inglés) en la web English Russia, si obviais a los que sólo se dedican a insultar vereis intervenciones por los dos lados que aportan interesante información.
Añado informe de Amnisitia Internacional de diciembre de 2006 sobre la situación de las minorias linguísticas en Estonia.
p.d: Acabado el post acabo de ver esto en http://www.cafebabel.com/es/article.asp?T=T&Id=10781 que no deja de ser reflejo de como son las cosa en la realidad: "La radicalización de las posiciones entre estonios y rusos se esfuma cuando toman la palabra los jóvenes. Jelena, de 21 años, a pesar de sus orígenes rusos, dice: “Si quieren trasladar el monumento, que lo hagan y punto. Entiendo sus problemas y su punto de vista; además, no sería tan extraño”. Justo lo contrario de lo que defiende Tina, joven estonia que vive enfrente del “símbolo de la discordia” y se acerca más a las posiciones “rusas”: “No entiendo por qué deberían trasladarlo: siempre ha estado ahí y los verdaderos problemas comenzaron sólo cuando el Gobierno decidió retirarlo. ¿Por qué crear preocupaciones que podrían no existir?”. ". Invita a la reflexión...
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